MURALES EN PUERTA CERRADA 2

Fueron realizados en 1983 por el diseñador Alberto Corazón, por encargo del por entonces alcalde Enrique Tierno Galván. Se trataba de embellecer varias destartaladas medianerías. Desgraciadamente, poco a poco van desapareciendo.
Junto la embocadura de la Cava Baja, de los tres que hubo, únicamente sobrevive el bodegón de frutas y verduras.
En el lado oriental de la plaza, inicialmente había tres murales. Uno de ellos era un trampantojo que simulaba una fachada decimonónica, donde, subido en una falsa cornisa, había dibujado un pintor de brocha gorda, acompañado de un gato. Desapareció tras la apertura de varios balcones reales.
Se mantiene el mural que esquematiza el viejo lema de la villa: “Fui sobre agua edificada, mis muros de fuego son” que ha referencia a las abundantes aguas subterráneas de la ciudad y a la piedra de pedernal de las murallas árabe y cristiana, que emitían reflejos dorados desde la lejanía Y también un trampantojo, a modo de celosía con una enredadera. En ambos casos el estado de conservación es lamentable, han desaparecido partes pintadas y hay añadidos de graffitis
                       8