CALLE AMPARO

A mediados del siglo XVII, vino a parar a Madrid una joven de Granada, que ayudaba a las mujeres que estaban de parto a tener a sus bebés en buenas condiciones. Vivía por la zona de Lavapiés y era conocida como “la comadre de Granada”, aunque su verdadero nombre era el de Amparo. Cada vez que acudía a un parto, ponía en un cazo agua caliente con un capullo de rosa, el cual se iba abriendo a la par que el bebé nacía. Acudía a la llamado de todos los que la requerían, sin importarle que fuera una pobre mujer sin recursos, o familias de alto linaje y nobleza, como una vez, que fue llamada para cuidar del parto de la mismísima reina y esposa de Felipe IV. En su honor, la calle donde vivía recibió el nombre de Comadre de Granada, luego sólo de la Comadre y ahora el de Amparo. Sí se conserva la Travesía de la Comadre. La calle del Amparo es actualmente como un zoco, una sucesión de tiendas en manos de asiáticos y árabes con ventas al por mayor de todo tipo de ropa, bisutería, artesanía o baratijas de todo tipo
                       8